Vendimia de Invierno 2023

Vendimia de Invierno 2023

Monovarietal de Malvasía Volcánica proveniente de cinco parcelas, ubicadas en distintos puntos de la isla; Playa Quemada, Geria, Ye, Cuchillo y Masdache. Esta vendimia es el segundo año que entra en el proyecto de investigación, siendo cosechada el 15 de febrero del 2023.

Edición limitada de 2.262 botellas.

ELABORACIÓN

La vendimia se lleva acabo de forma manual, en cajas de 18-20 kg. Se hizo una vinificación con racimo entero, sin despalillar, encubándolo en un depósito de inox. Iniciando la fermentación con nuestras propias levaduras, encontradas en una de las parcelas de uno de nuestros viticultores. Se descuba como si fuera una elaboración de tinto, prensando y terminando de fermentar solo mosto.

Al finalizar la fermentación, en bodega permanecen en rama, buscando mantener los vinos turbios con el objetivo de evitar oxidaciones, mantener los vinos más frescos, y permanezcan con sus lías finas para ganar en boca. Posteriormente, se estabilizan y filtran para su embotellado.

Elaborar un vino blanco mediante maceración carbónica, hace que los vinos sean frescos y que el mosto en contacto con la piel extraiga todos esos aromas procedentes sus hollejos como es la salinidad.

NOTAS DE CATA

Vista:
Amarillo pajizo, limpio y brillante.

Aroma:
Domina el carácter varietal de la Malvasía Volcánica con aromas terpénico como la rosa, azahar, corteza de naranja, guayaba y ligeros aromas a cereza, guindas provenientes de la fermentación intracelular al que se sometió el vino. Por último, también se apreciar aromas vegetales cómo el hinojo o el eucalipto.

Boca:
Muy complejo, con un profundo paso por boca. Destaca la salinidad, que nos recuerda a su origen y la cercanía al océano Atlántico. En boca recuerda esos aromas maduros que veíamos en nariz sobre todo el albaricoque. Fresco, con volumen y un final amplio.

CONTEXTO

Uno de los retos actuales que se enfrenta la viticultura es poder hacer frente al cambio climático, siendo el clima uno de los factores que más influye en el desarrollo de plagas y enfermedades, y también del estrés hídrico que pueda sufrir la vid en su ciclo vegetativo.

Por ello se ha realizado una poda temprana, con el objetivo de cambiar el ciclo de la vid, para aprovechas cierto periodo del año donde las precipitaciones en la Isla de Lanzarote son mayores.

De aquí parte la necesidad de adaptar el sector a prácticas alternativas sostenibles que ayuden a evitar problemas de estrés, resistencias a fitosanitarios de uso convencional, aumento alcohol probable en el vino.

Para la propuesta de este proyecto, se han analizado varios beneficios en relación con el cambio climático. Algunos de ellos son: que, en el periodo más bajo de temperaturas de la isla, las uvas en la vid permiten una concentración equilibrada de azucares y sabores, manteniendo una acidez más alta. Compensando la disminución de acidez causada por condiciones más cálidas.

En este proyecto se ha llevado a cabo un análisis del método propuesto sobre la poda temprana, siendo una posible solución para ciertas regiones vinícolas. Su viabilidad depende de factores climáticos específicos, como los que cuenta la Isla de Lanzarote.